Nuevo artículo para Mindalia: ¿Te falta algo en la vida?

tulibrodelavida_articulos_mindalia(Publicado por primera vez en Mindalia) Piensa en todas las áreas importantes de tu vida: familia, trabajo, ocio, relaciones, desarrollo personal, espiritualidad, pareja, amistades, etc. Las tuyas. Ponlas en una lista (mental o física). ¿Dirías que están todas al mismo nivel de desarrollo? ¿Están todas cuidadas? ¿Te falta algo en alguna? ¿Hay alguna que sea claramente mejorable? ¿Cuál es la que más atendida está? ¿Cuál ha recibido poca atención? Incluso en el caso de que estés completamente satisfecho de cómo están ahora mismo todas las facetas de tu vida, siempre puedes aspirar a más.

¿Por cuál empezarías? ¿Cuál es prioritaria atender primero? ¿Cuál es la necesita tu atención ahora? ¿Hay alguna que si mejorara, pudiera mejorar al resto?

Elige una. Es poco realista pretender cambiar toda tu vida a la vez, básicamente porque no es práctico tener tantos frentes de batalla abiertos simultáneamente. Tus recursos, atención, energía y fuerzas estarían desperdigadas en mil caminos.

 

Empieza por una sola batalla y termínala. Piensa en cómo quieres que esté ese área de tu vida en unos meses y cuál sería el primer paso que podrías dar en esa dirección.

Para esto no necesitas a un Coach, pero así es como trabajamos. Troceamos la inmensidad para concretar pasos, traemos a tierra lo abstracto para que tenga una forma definida y conozcas tu propio interior. Es importante hacerse preguntas pero más todavía buscar las respuestas y no quedarse en los pensamientos conocidos.

Una vez que sepas cuál es ese desafío concreto al que te enfrentas, pregúntate cuáles son las habilidades que tienes que te ayudarán ahora, o las que tienes que desarrollar. También cuáles son los impedimentos internos y externos que tendrás que transformar. Todo lo que no sirve ya, fuera, no seas leal a lo que te limita. Mira qué hicieron otros antes que tú para conseguirlo, pide ayuda si no puedes solo y sé consciente de lo que tendrás que dejar de hacer, porque te aleja de tu objetivo, y de los nuevos hábitos que tendrás que adquirir. Y cuando sientas que ya está bien de esperar, ¡ve a por ello!

Solemos hacer listas de propósitos de Año Nuevo, pero no suelen cumplirse porque la estrategia es nefasta: ponemos un montón de cosas en esa lista y dejamos que mágicamente el día 1 de Enero nos convirtamos en la persona que la hará realidad. Pero eso tiene que empezar ahora para que ese día seamos esa persona. Es decir: pregúntate qué necesitas para ser la persona que hará realidad la lista y comprométete contigo mismo.

El cerebro se bloquea si se le da muchos cambios a la vez, así que céntrate en lo más importante y no añadas más a la lista. Ponte un plazo de tiempo para conseguirlo, porque funcionamos mejor con metas temporales. Piensa en el primer paso a dar para logarlo y hazlo y luego el siguiente, y luego el siguiente…. Visualiza quién serás o cómo te sentirás cuando lo consigas y deja que esa visión te diga cómo logarlo. Y muy importante, ten claro el “para qué” quieres lograrlo, el propósito fundamental que hay detrás de ese deseo, porque esa será la motivación que te ayudará a conseguirlo, la gasolina que dará vida a tu motor y con el que podrás realizar las acciones que te propongas.

Atrévete este año a hacer una lista de propósitos realista y alcanzable.

¿Cuál es el propósito que este año por fin lograrás?

 

Nuria Velasco

Coaching, PNL y Registros Akáshicos

www.tulibrodelavida.com

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